La estufa a leña de alto rendimiento -también llamada rusa- es de todas las
estufas la más económica y de fácil construcción. La más importante de sus
ventajas es la capacidad de acumular calor en su estructura para entregarlo
lentamente a lo largo de las horas, aún después de apagada. Comparada con una
estufa común de hierro, la estufa rusa produce el mismo calor con 100 kg de leña
que la de hierro con 400 kg.
Es considerada de alto rendimiento porque al
estar construida con ladrillo refractario que tiene la capacidad de absorber el
calor, acumularlo y luego entregarlo lentamente; la temperatura de combustión es
muy alta y el recorrido de los gases dentro de la estufa es muy largo antes de
salir por la chimenea. De esta manera, gran parte del calor queda dentro de la
casa. Otra característica muy importante es que la combustión es muy completa.